El empresario brasileño Eike Batista fue en su día la séptima persona más rica del mundo, gracias a su petrolera OGX. Pero su negocio no estaba muy bien gestionado y acabó perdiendo dinero. Batista, que llegó a tener un patrimonio neto de más de 30.000 millones de dólares, se declaró en quiebra en 2012. (Foto: Instagram)