La detención de Sean Diddy ha generado un gran revuelo en las redes sociales, ya que Diddy se enfrenta a graves cargos de extorsión, tráfico sexual y conspiración. La situación ha suscitado muchas especulaciones, sobre todo en relación con posibles conexiones con casos emblemáticos de la cultura pop, como la muerte de Michael Jackson en 2009.
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Una de las teorías apunta a una supuesta relación entre Diddy y la sobredosis de Jackson, que en ese momento criticaba a Sony y a su ex mánager Tommy Mottola, ex marido de la cantante Mariah Carey. Además, Michael se enfrentaba a acusaciones de pederastia, lo que aumentó las sospechas de una posible conspiración.
¿Qué une a Diddy y Michael Jackson?
En 2002, Michael Jackson acusó a Sony de retener los derechos de sus canciones e hizo unas declaraciones públicas en las que llamaba ‘demonio’ a Tommy Mottola, entonces presidente de la discográfica. El vínculo entre el Rey del Pop y Diddy radica en el hecho de que Mottola era amigo íntimo del rapero, que más tarde se enfrentó a acusaciones de tráfico sexual y otros delitos; ambos incluso hicieron negocios juntos.
Casualmente, fue en esta época cuando las cosas empezaron a complicarse para Jackson, con acusaciones de pederastia por parte de un grupo de niños. Los internautas señalan que algunos de estos niños admitieron más tarde que habían sido pagados para inculpar al artista.
Sin pruebas concretas, esta teoría sugiere que Jackson dejó una grabación antes de morir en la que denunciaba una posible persecución. La conspiración afirma que predijo su muerte, supuestamente escenificada como una sobredosis.
Otro punto planteado por los teóricos es que el médico a cargo del hospital donde Jackson fue declarado muerto más tarde se convirtió en el guardia de seguridad de Diddy.
Aunque Diddy ha logrado librarse de varios cargos en el pasado, los tribunales estadounidenses decidieron tomar un camino diferente esta vez. Fue acusado y detenido en Nueva York el 17 de septiembre de 2024 por cargos de tráfico sexual y extorsión.
Actualmente permanece en una penitenciaría federal conocida por sus duras condiciones. Sus abogados solicitaron su puesta en libertad provisional, pero su petición fue denegada por riesgo de fuga. El juicio del caso sigue pendiente, con cargos adicionales de violencia sexual y agresión física.