Guilherme Mendonça, de 17 años, transformó su vida tras superar años de acoso por ser delgado. Hoy, con 85 kg y solo un 10% de grasa corporal, brilla en el mundo del culturismo y participa en competiciones en Anápolis, a 55 km de Goiânia (Brasil). En las redes sociales, comparte su rutina de entrenamiento, su dieta y sus logros en el culturismo.
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Recordando con humor sus años de adolescencia, Guilherme cuenta a G1 que algunas personas le llamaban ‘Capa de Batman’ por su físico delgado y el hecho de que llevaba gafas. “Era delgado, tenía los dientes torcidos y llevaba gafas”, explicó.
La motivación para empezar a entrenar surgió de un episodio memorable con su tío. A los 14 años, Guilherme ayudó a construir la casa de su pariente y, mientras intentaba cargar un saco de cemento, se cayó después de dar sólo dos pasos. “Hasta hoy es un chiste en la familia”, contó.
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A los 15 años empezó a practicar fisicoculturismo, decidido a ganar masa muscular y cambiar su cuerpo. “Después del episodio del saco de cemento pensé: no quiero esto en mi vida, y empecé a entrenar”, dijo.
Con el estímulo de colegas y profesionales, Guilherme decidió competir. Según el joven, la preparación para el campeonato comenzó un año después, a los 16 años.
En marzo de este año, Guilherme participó en su primer campeonato, con un peso de 69 kg y un 4% de grasa corporal. Quedó cuarto entre ocho competidores y ya se está preparando para el próximo desafío, en marzo de 2025. Actualmente entrena dos horas al día, seis días a la semana, manteniendo su compromiso con el culturismo e inspirando a otros con su camino de superación.