Emilio Santana, de 14 años, alumno de noveno curso de la St Raphael Academy de Providence, tuvo un gran gesto de solidaridad. El joven se cortó el pelo para donarlo a los niños enfermos después de años dejándoselo crecer.

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La decisión fue motivada por una experiencia que tuvo en tercer grado, cuando vio a una niña en la playa perder su cabello debido a una condición médica. «Se quitó el sombrero y su pelo se fue con él. Eso me hizo querer actuar», dijo Santana a WJAR. Desde entonces, el joven decidió que se dejaría crecer el pelo para ayudar a quienes se enfrentan a situaciones similares.

Además de su compromiso con la donación, Santana es deportista de lucha libre y ganó el campeonato estatal de Rhode Island en su categoría de edad. Se entrena en el Nathaniel Green, bajo la supervisión del entrenador David González, y representa a su colegio, aunque no tiene equipo de lucha propio. «Es uno de los deportistas más comprometidos y hace lo que haga falta para conseguir sus objetivos», afirmó el entrenador.

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Durante el tiempo que se dejó crecer el pelo, Santana se enfrentó a comentarios negativos por ser el único chico con el pelo largo en su colegio. «La gente decía cosas como “los chicos no deberían llevar el pelo largo”, pero yo sabía que lo hacía por una buena razón», dijo.

Hace poco, cuando se preparaba para entrar en un nuevo colegio, Santana decidió que era el momento de cortarse el pelo, que donó a la organización ‘Hair We Share’, encargada de proporcionar pelucas gratuitas a niños con pérdida de cabello. «Elegí esta organización porque no cobran por las pelucas. Quería que esa persona recibiera mi pelo gratis», explicó.

Ahora, Santana continúa su carrera de luchador, sabiendo que su donación puede haber ayudado a mejorar la vida de otra persona. «Aunque fuera algo tan pequeño como un corte de pelo, sabía que podía hacer feliz a alguien», concluyó.