El gobierno de Biden ha advertido a Turquía de que no acoja a miembros de la cúpula de Hamás, tras conocerse que varios altos cargos de Hamás abandonaron Qatar con destino a Ankara la semana pasada.
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Preguntado por las informaciones según las cuales el gobierno turco acogía a dirigentes de la rama política de la organización, el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Matthew Miller, declaró el lunes a la prensa que no estaba en condiciones de rebatir la acusación.
“No creemos que los dirigentes de una malvada organización terrorista deban vivir cómodamente en ningún lugar”, declaró Miller, añadiendo que esto se aplica especialmente a la capital turca, una “importante ciudad de uno de nuestros principales aliados y socios”.
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La emisora pública israelí Kan afirmó que miembros de Hamás abandonaron Doha con destino a Ankara después de que el gobierno qatarí anunciara que abandonaba sus anteriores esfuerzos por negociar un alto el fuego entre Israel y Hamás.
Fuentes diplomáticas turcas habían rechazado anteriormente las informaciones según las cuales Hamás iba a trasladar su oficina política a Turquía, afirmando que los miembros del grupo militante visitan el país en contadas ocasiones.
Qatar abandonó sus esfuerzos de mediación tras la creciente frustración por la falta de avances en ambas partes del conflicto de Gaza.
Hace quince días, un funcionario estadounidense afirmó que la administración Biden había comunicado a Qatar que la oficina del grupo militante en Doha -establecida para que los representantes de Hamás pudieran participar en la negociación de un alto el fuego- ya no era útil y que la delegación de Hamás debía ser expulsada.
Qatar reiteró que ya no hay forma de ‘negociar un acuerdo de buena fe’ y que, por tanto, la oficina política de Hamás ya no sirve para su propósito.
Un alto cargo de Hamás dijo entonces que eran conscientes de la decisión de Qatar de suspender los esfuerzos de mediación, pero insistió en que no se les había dicho que abandonaran el país.
Miembros de Hamás en Turquía
Se sabía que destacados dirigentes de Hamás, como Ismail Haniyeh y Saleh al-Arouri, habían visitado y permanecido en Turquía antes de ser abatidos por el ejército israelí.
Mientras tanto, las relaciones entre Turquía e Israel se han deteriorado desde que Israel lanzó su campaña militar en la Franja de Gaza tras los ataques de Hamás contra el sur de Israel el 7 de octubre de 2023.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, critica duramente la operación militar israelí en Gaza, que ha tachado de genocidio, y no considera a Hamás una organización terrorista.
El pasado miércoles, Erdogan declaró que su gobierno había cortado todos los lazos con Israel y que «mantendría esta postura en el futuro».
