Diego Silva dos Anjos, marido de Deise Moura dos Anjos, sospechoso de haber envenenado el pastel que causó la muerte de tres personas de la misma familia en Torres, en el litoral norte de Rio Grande do Sul (Brasil), será llamado de nuevo a declarar como testigo en el caso. Según la Policía Civil, no está siendo investigado y deberá ser oído en los próximos días.
El viernes 10 de enero, la policía confirmó que Deise había comprado y utilizado arsénico para envenenar el pastel. Un examen forense realizado en el cuerpo del suegro de Deise, Paulo, demostró que también murió por ingerir arsénico hace cuatro meses.
Cuando se le preguntó si el marido de Deise estaba implicado en el crimen o si sabía de los supuestos planes de su mujer, el jefe de la Policía Civil de Torres, Marcos Vinicius Veloso, dijo que eso aún se está investigando. Por el momento, está siendo tratado como testigo.
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En su declaración anterior, Diego dijo que se había enterado del caso por la prensa y que llevaba más de 20 años alejado de su familia, tras una pelea con su madre por dinero. También declaró a la policía que Deise y su madre tenían una relación con «altibajos», y que cree que su mujer no sería capaz ni estaría motivada para matar a miembros de su familia.
Deise Moura dos Anjos se encuentra detenida temporalmente y está siendo investigada como sospechosa de triple homicidio y tres tentativas de asesinato. La fuente de la contaminación por arsénico fue la harina utilizada para hacer el pastel que consumieron las víctimas, según las autoridades.
El examen forense realizado al cadáver de Paulo Luiz dos Anjos, suegro de Deise fallecido en septiembre, reveló que también había ingerido arsénico antes de morir. Paulo murió de una infección intestinal en septiembre de 2024, tras consumir plátanos y leche en polvo que su nuera le llevó a casa.
La defensa de Deise afirma que «las declaraciones realizadas en la rueda de prensa aún no han sido llevadas a juicio en el proceso sobre el caso», por lo que «espera los documentos y pruebas completos para analizarlos y comentarlos».
