Lo que se suponía sería una inocente entrevista para promover el nuevo libro de memorias de Ivana Trump, Raising Trump, terminó desatando la furia de Melania.
La primera esposa de Donald Trump se sentó con ABC para hablar de su nuevo libro que documenta su vida desde sus días en Checoslovaquia hasta su matrimonio con el futuro presidente de los Estados Unidos y la crianza de sus tres hijos.
Pero como siempre sucede con esta familia, el drama no se hizo esperar. Esta vez, la víctima de la afilada lengua de un Trump no fueron ni los mexicanos, ni los musulmanes, ni los dreamers, sino la misma esposa del magnate convertido en político.
“Tengo un número directo con la Casa Blanca” dijo Ivana después de revelar que habla con el presidente casi una vez cada dos semanas. “Pero no quiero llamarlo porque Melania está allá y no quiero provocar celos o algo así porque soy la primera mujer de Trump ¿cierto? Soy la primera dama,” dijo a ABC entre risas.
Las palabras de la autoproclamada primera dama pueden parecer una inocente broma a algunos y una mera estrategia de publicidad para la mayoría (de nosotros). Sean lo que sean, esas palabras dieron en el hígado de Melania Trump, quien, a diferencia de otras veces que se ha mantenido por encima de la controversia y se ha aislado de la negatividad y las críticas, respondió a través de un compartido por su directora de comunicaciones, Stephanie Grisham.
“La señora Trump ha hecho de la Casa Blanca el hogar de Barron y del presidente. Ell ama vivir en Washington, DC, y está muy honrada con su rol como primera dama de los Estados Unidos. Ella planea usar su título y su rol para ayudar a los niños, y no para vender libros,” se leía en el comunicado, que agregaba “claramente no hay ningún tipo de sustancia en esta declaración de una ex. Esto desafortunadamente no es más que una búsqueda de atención para su propio beneficio.”
Ivana y Donald Trump se casaron en 1977, e inmediatamente se convirtieron en influyentes figuras de la sociedad neoyorquina durante los 80’s. Tuvieron tres hijos juntos: Donald John Jr. Ivanka Marie, y Eric Frederick. Ivana solicitó el divorcio en 1991. Volvió a casarse dos veces después de su matrimonio con Trump.
Pero aún 26 años después de su separación legal y definitiva, parece que todavía hay algunos asuntitos sin resolver entre Donald, su primera, y su actual esposa.
¿Acaso esto significa que Ivana perderá sus beneficios de teléfono con la Casa Blanca? ¡Ya lo veremos!
