Ashley Graham humilló a hater por asumir que estaba embarazada

Lección del día (por milésima vez): no asumas ni preguntes a una mujer si está embarazada— al menos no hasta que empiece ella misma empieza a soltar pistas demasiado obvias. Y si la persona que piensas que podría estar embarazada es alguien famosa, puedes primero, no sé, investigar en Google. De lo contrario, te estás preparando para una muy merecida humillación pública, tal como lo hizo Ashely Graham con un «fan» que carece de sentido común.

El martes, la ex alumna de America’s Next Top Model tuvo la mejor respuesta a un comentario en un video que publicó en su Instagram donde se le ve bailando en un bikini rosa al ritmo de la canción de N.E.R.D. y Rihanna, Lemmon, mientras disfrutaba de sus vacaciones.

Cuando un grosero seguidor tuvo la audacia de preguntar si lo que se apreciaba en el video era una pancita de embarazada, la autoproclamada guerrera de la positividad corporal se negó a ser avergonzada por su figura curvilínea y en su lugar, respondió con una sencilla pero letal frase:

«Eso es simplemente se llama grasa», contestó.

Su corta pero feroz respuesta causó un gran revuelo en el Instagram de la modelo, con fanáticos de la activista del cuerpo saliendo a su defensa, señalando acertadamente que, para empezar, Ashley ni siquiera es gorda. Otros agradecieron a Graham por ayudar a mujeres de todos los tamaños a sentirse mejor con sus cuerpos.

En el pasado, Graham ha hablado abiertamente sobre cómo la gente en línea la critican por ser o «demasiado gorda» o «demasiado delgada». Hace apenas un par de años, Ashley escribió un extenso ensayo sobre el amor propio y el acoso en redes sociales.

«Para algunos soy demasiado curvilínea. Para otros, soy demasiado alta, con busto demasiado grande, demasiado ruidosa y, ahora, demasiado pequeña, simplemente demasiado, pero al mismo tiempo no lo suficiente. Cuando publico una foto de un ‘buen’ ángulo, recibo críticas por parecer más pequeño y venderme. Cuando publico fotos que muestran mi celulitis, estrías y lonjas, me acusan de promover la obesidad. El ciclo del body shaming debe terminar. Ya estoy harta,” escribió.

¡Enséñales, Ashley!

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