Aunque Geraldine Bazán ha dejado en claro que no quiere que sus pequeñitas convivan con la que fuera la amante de su exesposo, las fotos de Irina Baeva y las hijas de Gabriel Soto ha dejado en claro que el actor ha hecho oídos sordos a las peticiones de su expareja.
Después de que Bazán recurriera a redes sociales para acusar a Soto de “[violar] los derechos” de sus hijas al obligarlas a saludar a la actriz rusa, el galán de telenovelas ha respondido a las acusaciones con una serie de fotografías de las pequeñas Alexa y Elissa junto a Baeva.
“Aquí en momentos de llanto, confusión e inseguridad,” se burló Gabriel, haciendo referencia a las declaraciones de Geraldine. “Nosotros ya cerramos la carpeta de esa historia de ataques donde salimos perjudicados […] Deseamos de todo corazón poder convivir en paz y de manera civilizada pero desafortunadamente ya no está en nuestras manos.”
El actor agregó: “Estas fotos no fueron tomadas con la intención de publicarlas ya que fueron momentos íntimos, pero lo hago ahora dadas las circunstancias.”
En respuesta, la protagonista de El Último Dragón aseguró que las fotos de Irina Baeva y las hijas de Gabriel Soto fueron tomadas sin su autorización.
“No sé, hoy me enteré porque vi unas fotos, pero si lo hacen, lo hacen a escondidas. La verdad es que lo hacen sin mi autorización entonces no te puedo contar más de eso porque yo me enteré también junto con ustedes,” dijo la estrella de televisión a la prensa.
Algo nos dice que los dimes y diretes en el drama Bazán-Soto-Baeva están lejos de terminar…
