Illia ‘Golem’ Yefimchyk, uno de los grandes nombres del culturismo mundial, falleció el domingo 9 de septiembre a los 36 años de edad a causa de un paro cardiaco. Su muerte causó gran conmoción entre los aficionados a este deporte, que habían seguido su intensa y disciplinada trayectoria en el mundo del culturismo.
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Rutina y dieta intensa
Durante su carrera, Golem llamó la atención por su impresionante físico y por seguir una dieta muy calórica. Medía 1,85 metros y pesaba unos 160 kilos, y se mantenía en forma consumiendo unas 16.500 calorías al día, repartidas en al menos siete comidas. También adquirió notoriedad al revelar detalles de su rutina alimentaria, que implicaba enormes cantidades de comida.
En octubre del año pasado, Golem se hizo famoso en las redes sociales cuando informó de que se había comido 108 piezas de sushi en un solo día. Su dieta se consideró un verdadero reto, incluso para otros culturistas experimentados.
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Ejemplo de dieta diaria
La revista Men’s Health publicó un ejemplo de su impresionante dieta diaria:
- Desayuno (8h): 300 gramos de avena.
- Primera comida (11h): 3 platos de sushi (1.600 gramos de arroz y 800 gramos de salmón).
- Segunda comida (13.30): 1.300 gramos de ternera con crepes y helado.
- Tercera comida (15.40): 500 gramos de arroz, aceitunas, omega 3 y pasta fresca.
- Cena 1 (16.50 h): 200 gramos de queso con 300 gramos de pasta.
- Cena 2 (19.30 h): 1.300 g de ternera y 700 g de requesón.
- Última comida (21.15 h): 14 tortitas de avena con sirope de arce.
Con esta rutina alimentaria, Golem consiguió un cuerpo impresionante y se convirtió en una leyenda del culturismo. Sin embargo, la intensidad de su dieta y entrenamiento puede haber contribuido al trágico desenlace.