La bebé Posie, nacida prematuramente y actualmente en ‘cuidados críticos’, sobrevivió a una caída de 27 metros después de que su madre, Emma Atkinson, se precipitara desde el décimo piso de las Torres Shakespeare de Leeds (Inglaterra). El incidente se produjo el martes 22 de octubre por la mañana y causó la muerte de Emma, que tenía 30 años y era madre de cinco hijos.
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Emma esperaba a Posie y había elegido el nombre de su hija semanas antes de su nacimiento. En una emotiva publicación en las redes sociales, la madre expresó su felicidad al anunciar que estaba embarazada de una niña y que el parto estaba previsto para dentro de diez semanas. Tras el accidente, su hija Demi compartió un homenaje en Facebook, pidiendo a su madre que ‘volviera a casa’ y expresando su dolor.
La policía ha declarado que no hay circunstancias sospechosas relacionadas con la muerte de Emma. En el lugar de la tragedia se dejaron globos y flores como homenaje. Un arreglo floral tenía cinco mariposas, símbolo de la conexión de Emma con sus hijos.
Vecinos y amigos expresaron su pesar por la tragedia. Una residente local, Mandy Shires, declaró a MailOnline que la ventana desde la que cayó Emma había estado abierta todo el día. “No tenía ninguna posibilidad de sobrevivir a una caída desde tal altura, pero sólo puede ser un milagro que el bebé esté vivo”, declaró.