Walter Carr, un joven de Alabama (EE UU), fue contratado por una empresa de mudanzas. La víspera de su primer día de trabajo, se enfrentó a un reto inesperado: su coche se averió. Decidido a no perderlo, Walter tomó una decisión impresionante: iría andando al trabajo.

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El trayecto era de 32 kilómetros y tenía que estar en casa de un cliente a las 8 de la mañana. Para cumplir su compromiso, Walter salió de casa a las 4 de la madrugada. Durante su caminata, se le acercó un policía que, al oír su historia, quedó asombrado por la determinación del joven. El policía se ofreció a llevarle y, antes de continuar, le invitó a desayunar.

Walter llegó al domicilio de su cliente, Jenny Lamey, hacia las 6.30 de la mañana, acompañado por el policía. El agente explicó que encontró a Walter caminando más de 20 kilómetros para ir a trabajar. Jenny se sintió profundamente conmovida por la determinación y la ética de trabajo del joven.

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Mientras trabajaba, Walter contó parte de su historia. Contó que vivía con su familia en Nueva Orleans, pero que, tras el huracán Katrina de 2005, se trasladaron a Texas en busca de una nueva vida.

Conmovida por la dedicación de Walter, Jenny decidió compartir su historia en las redes sociales. Su publicación llamó la atención de Luke Marklin, director de la empresa de mudanzas donde Walter había sido contratado. Impresionado por la determinación del joven, Luke viajó de Tennessee a Alabama para conocerlo en persona.

Durante la reunión, Luke sorprendió a Walter con un regalo especial: las llaves de su propio coche, un Ford Escape. “Estoy muy orgulloso de tener a Walter en nuestro equipo. Ya tenemos un alto nivel de servicio, y él lo ha elevado aún más”, dijo el director.

Walter no pudo contener las lágrimas y lloró de alegría ante el inesperado gesto. Su historia se convirtió rápidamente en fuente de inspiración para muchos, poniendo de relieve valores como la perseverancia, el valor y la humildad.

El viaje de Walter Carr demuestra que la determinación y la dedicación pueden abrir puertas y transformar vidas, incluso ante los mayores desafíos.